Hebreos 5:9 Mostrar el Capítulo y las notas   9 Y habiendo sido perfeccionado, [Jesús] llegó a ser Autor y fuente de eterna salvación para todos los que presten atención y le obedezcan,1 [La salvación es ser liberados (hechos libres) de todo pecado, aún los deseos, por medio de la obediencia persistente al Espíritu que crucifica al espíritu egoísta humano en la cruz interna de la negación propia. Usted debe esperarle persistente y pacientemente en silencio para oír sus mandatos, a medida que usted oye y vela; entonces le presta atención y le obedece. De la Palabra del Señor en el interior: "La salvación viene a aquellos que esperan. Usted debe esperar en el Señor para recibir la salvación. La salvación llega a aquellos que hacen caso y obedecen. Tú conocerás la verdad cuando veas a Jesús traer tu salvación. La salvación ocurre cuando tú eres uno con Cristo y Dios".] | Tito 2:11-14 Mostrar el Capítulo y las notas   11 [La gracia, (el Espíritu, la Luz), es dada a todo hombre para que pueda hacer caso a su aparición suave y anónima y el llamado al arrepentimiento de sus malos caminos, porque Dios quiere que todos los hombres sean salvos.] Porque la gracia de Dios que trae salvación se ha manifestado a todos los hombres, 12 enseñándonos a negar la impiedad y los deseos mundanales, y cómo vivir sobria, justa y piadosamente en este mundo presente, [La gracia está en el corazón de cada hombre, esperando a que él vaya hacia su interior para ser enseñado y cambiado, para que llegue a ser justo, puro, y santo. Un "creyente" que muere mientras todavía está pecando está contaminado y es expulsado del cielo; la gracia no es una excusa para pasar por alto el juicio o el infierno; todo hombre es juzgado por sus palabras y sus obras.] 13 y recibimos la esperanza bienaventurada, la manifestación gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo, [El gran Dios, el Padre, y nuestro Salvador, Jesucristo, son revelados mientras vienen y hacen su morada en los corazones de aquellos que aman y obedecen Jesús. Juan 14:23. De la Palabra del Señor en el interior: "La segunda venida es una experiencia personal. La segunda venida es en los corazones de los creyentes purificados".] 14 quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad [infracción de la ley, pecado] y purificar para sí mismo un pueblo propio, ferviente por buenas obras.1 [Los que son de Cristo Jesús han crucificado la carne (la naturaleza pecaminosa) con sus pasiones y deseos (concupiscencias y afectos). Gál 5:24. Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen. Juan 10:27. De la Palabra del Señor en el interior: "Si todavía estás pecando, tú perteneces al pecado y no a mí."] | Hebreos 9:28 Mostrar el Capítulo y las notas   28 así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos. Y Él aparecerá una segunda vez, ya no para llevar el pecado, sino para traer completa salvación a los que le esperan persistente y pacientemente.3[Aquellos que están persistente y pacientemente esperando a Dios, ven a Jesús aparecer en sus corazones, y ven a Jesús traer sus salvación, lo cual es ser liberado de todo pecado. Esperar a Dios es sentarse persistentemente en humilde silencio, escuchar su voz y sus palabras, velar sus revelaciones, oír sus mandatos, y después obedecerle; sólo aquellos que le hacen caso y le obedecen reciben salvación eterna. Heb 5:9. Pero si esperamos lo que no aun vemos, entonces lo aguardamos [la salvación] con paciente perseverancia, Rom 8:25; esperamos a la salvación. De la Palabra del Señor en el interior: "Usted debe esperar en el Señor para recibir la salvación."] | Filipenses 2:12 Mostrar el Capítulo y las notas   12 De modo que, amados míos, así como habéis obedecido siempre--no sólo cuando yo estaba presente, sino mucho más ahora en mi ausencia--, continuad obrando para vuestra salvación con temor y temblor;1 [De la Palabra del Señor en el interior: "La salvación es ser liberados del pecado. La salvación es ser liberado incluso del deseo por tus pecados." En sus mensajes a las siete iglesias, Jesús le menciona a toda iglesia (todas las siete) como sus obras son la clave. Jesús dijo: no he hallado que tus obras son perfectas delante de Dios. Apoc 3:2-3. Jesús quiere obras perfectas.] |