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Hebreos 9:14

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 14 ¡cuánto más la sangre de Cristo, quien mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará nuestras conciencias de las obras muertas [de vuestra propia voluntad] para servir al Dios vivo!1 [El tercer testigo en la tierra, la sangre de Jesús, es rociada en el corazón y la consciencia; y por esta sangre usted es santificado y limpiado de todas sus obras muertas para servir al Dios viviente y para ya no servir sus obras muertas; las obras muertas son sus obras y palabras que se originaron de su propia voluntad, su mente carnal, y su imaginación impía — obras hechas por los hombres que están muertos a la vida de Dios que Adán perdió por todos los hombres. Las obras de fe obediente a las órdenes de Dios no son obras muertas y son esenciales. De la Palabra del Señor en el interior: "Cuando tú eres limpiado de las obras muertas, eres liberado de servir a la iniquidad para servir a DiosFelices son aquellos que sirven a Dios en su reino." Las obras muertas también incluyen obras obsoletas de la ley tales como: sacrificios, circuncisión, diezmos, días, sábados, comidas, etc.]

Proverbios 16:6

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 6 Por misericordia y verdad la iniquidad [el pecado] es purgada [del corazón], y por medio del temor de Jehovah los hombres se apartan del mal. [¿Qué verdad limpia el mal para hacerlo libre de pecado?—la palabra de verdad que usted oye que le es hablada a usted por el Señor. Si vosotros permanecéis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. Juan 8:31-32. ¿En qué palabra está usted para continuar o permanecer y obedecer?—la palabra que está en sus corazones para oír y obececer, Rom 10:8, Deu 30:10-15. El principio del temor de Dios es apartarse del mal.]

1 Corintios 5:7

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 7 Limpiaos de la vieja levadura, para que seáis una nueva masa, como sois sin levadura; porque Cristo, nuestro Cordero pascual, ha sido sacrificado.

Mateo 3:11-12

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 11 Yo, a la verdad, os bautizo en agua para arrepentimiento; pero el que viene después de mí, cuyo calzado no soy digno de llevar, es más poderoso que yo. Él os bautizará en el Espíritu Santo y fuego. [Este es el bautismo de la muerte, para luego ser resucitado con Cristo como una nueva criatura con un nuevo corazón, mente y espíritu. De la Palabra del Señor en el interior: "Usted es resucitado a una nueva vida, no sólo una imitación; Él es uno con nosotros y está siempre presente".]

 12 Su aventador está en su mano, y limpiará su era. Recogerá su trigo en el granero y quemará la paja en el fuego que nunca se apagará."3 [El Señor separa el trigo de la paja, lo precioso de lo vil. El trigo es las palabras de vida que él le ha hablado, y estas palabras son implantadas en su corazón para formar a Cristo en el interior; la paja es su naturaleza egoísta y pecaminosa de sus deseos, afectos, y orgullo, la cual después de la separación es quemada hasta el olvido por el fuego devorador y las llamas eternas de Jesús, la palabra pura de la vida, la cual es fuego. De la Palabra del Señor en el interior: "Dios pisotea y descarta todo lo que es profano; hay una muerte. Uno realmente muere para entrar al campamento". Este bautismo de muerte es el paso final antes de la traslación hacia el reino de Dios, para estar allí mientras estamos en la tierra y después para siempre.]

1 Juan 3:8

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 8 El que comete el pecado es del diablo, porque el diablo peca desde el principio. Para esto es revelado el Hijo de Dios [en nosotros]: para deshacer [en nosotros] las obras [pecado] del diablo.4 [Que nadie lo engañe, diciendo que todavía se puede pecar y pertenecer a Dios; los que aún están pecando sirven al diablo. Cristo es revelado en nuestra carne para destruir las obras del diablo, al condenar los pecados secretos en nuestro corazón, y después destruir aún nuestro deseo de pecar. Pablo confirma a Jesús destruyendo las obras del diablo en cada creyente purificado: "el Dios de paz aplastará en breve a Satanás debajo de vuestros pies." Rom 16:20.]

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