Mateo 7:22-23 Mostrar el Capítulo y las notas   22 Muchos me dirán en aquel día: '¡Señor, Señor! ¿No profetizamos en tu nombre? ¿En tu nombre no echamos demonios? ¿Y en tu nombre no hicimos muchas obras poderosas?' [Usted puede llamarle Señor; usted puede llamarle Maestro; pero también Judas lo hizo. Llamar a Jesús Señor no lo hace su Señor. Él es su Señor sólo si Él lo ha liberado de todo pecado, si él ha destruido su mente carnal, si él lo ha purificado, y si Él proporciona todas sus palabras para que usted hable, todos sus pensamientos, y todas sus acciones que debe realizar. Si usted todavía está pecando, usted es un esclavo del pecado, Juan 8:34; y si todavía está pecando, Jesús no puede ser su Señor porque usted no puede servir dos maestros. Todo hombre es juzgado por sus palabras y obras, incluyendo aquellos que dicen ser cristianos; Dios no le muestra parcialidad a ningún hombre. Debido a que ellos todavía están pecando cuando mueren, Jesús rechazará a muchas personas que piensan que son cristianos y lo llaman Señor; incluyendo aun aquellos que habían profetizado, echado fuera demonios, y realizado muchas obras maravillosas en su nombre. De la Palabra del Señor en el interior: "Yo sólo conozco a aquellos que han sido crucificados". Él está consciente de todos en todas partes, pero no los conoce porque ellos no habían sido crucificados, y él niega haber tenido parte en su profetización, echar fuera demonios, y sus obras poderosas, las cuales ellos aseguraron que habían sido hechas "en su nombre." Para ser hechas en su nombre, una persona debe estar libre de pecado, en unión con Él, y sentado en el cielo con Él; ellos no lo estaban, como él lo afirma claramente a continuación.] 23 Entonces yo les declararé: 'Nunca os he conocido. ¡Apartaos de mí, obradores de inquidad10 [pecado, infracción de la ley o de maldad]!' [De la Palabra del Señor en el interior: "Yo sólo conozco a aquellos que han sido crucificados". Él sabe todo, pero "conocerlo" a usted significa que él llega a ser uno con usted, lo cual ocurre después de que usted ha sido crucificado. A menos que sea limpiado y purificado por el Espíritu del Señor que destruye el pecado dentro del hombre, el corazón de todo hombre comienza lleno de maldad, lleno de pecado, contaminado, y descalificado para el cielo. Este pueblo me honra de labios, pero su corazón está lejos de mí. Marcos 7:6. Porque ;desde adentro, del corazón del hombre, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios, los robos, las avaricias, las maldades, el engaño, la falta de restricción, el ojo maligno [envidia], la blasfemia, el orgullo y la insensatez. Todas estas maldades salen de adentro y contaminan al hombre. Marcos 7:21-23. Y de ninguna manera entrará en ella [el cielo] ninguna cosa que está contaminada...Apoc 21:27. El Señor le está advirtiendo a aquellos que piensan que son cristianos y todavía pecan: 1) él no los conoce, y 2) él los echará en la oscuridad externa, excluido del cielo en el juicio. Seguirle a Él es obedecer lo que usted le oye a Él mandarle que haga; para oír, usted debe sentarse, pensar en su nombre, y después esperar en humilde silencio mientras escucha y vela. De la Palabra del Señor en el interior: "Todo el mundo está esperando que Jesús sea su excusa. Ningún hombre es promovido o excusado cuando repite el pecado. Sólo un corazón que está purgado del pecado es aceptable para Dios. Todos los hombres están sin excusa; si yo estuviera en silencio, ellos tendrían una excusa. Todos los hombres han oído el llamado al arrepentimiento. La gente debe soportar el precio de su comportamiento descarado." Esos llamados anónimos han sido oídos por todos los hombres para que se alejen del mal, los cuales, si son ignorados, los juzgarán, Juan 12:47-48; en el momento de su muerte toda palabra será tocada otra vez, oída, y recordada para su gran vergüenza y dolor.] | Mateo 25:6-12 Mostrar el Capítulo y las notas   6 A la media noche se oyó gritar: "¡He aquí el novio! ¡Salid a recibirle!" 7 Entonces, todas aquellas vírgenes se levantaron y alistaron sus lámparas. 8 Y las insensatas dijeron a las prudentes: "Dadnos de vuestro aceite, porque nuestras lámparas se apagan." [Ellas tenían una lámpara, como todos los hombres; pero no tenían la unción de parte del Santo. Ellas no habían mejorado su talento para recibir el aceite del Espíritu Santo. Ellos no habían persistido ni soportado en la cruz para disfrutar el surgimiento de la luz. De la Palabra del Señor en el interior: "Primero la luz se levanta, después el reino. El surgimiento de la luz será inconfundible; es una experiencia que destruye el ego. La luz viene de la fe en la voz."] 9 Pero las prudentes respondieron diciendo: "No, no sea que nos falte a nosotras y a vosotras; id, más bien, a los vendedores de aceite y comprad para vosotras mismas."1 10 Mientras ellas iban para comprar, llegó el novio; y las preparadas entraron con él a la boda, y se cerró la puerta. 11 Después vinieron también las otras vírgenes diciendo: "¡Señor, señor, ábrenos!" 12 Pero él respondiendo dijo: "De cierto os digo que no os conozco."2 [De la Palabra del Señor en el interior: "Yo sólo conozco a aquellos que han sido crucificados". Él sabe todo, pero "conocerlo" a usted significa que él llega a ser uno con usted, lo cual ocurre después de que usted ha sido crucificado. Él sólo lo conoce a usted si usted es uno con Él, en unión con Él; Él en usted y usted en Él. Él lo conoce cuando usted ha sido liberado incluso del deseo de pecar. Él lo conoce cuando usted ha pasado de muerte a vida. Él lo conoce si usted ha llegado a ser puro como Él. Si usted muere mientras todavía está pecando, usted será expulsado del cielo. Si usted no lo ha visto y no lo ha escuchado, entonces usted tampoco le conoce. De la Palabra del Señor en el interior: "Escucha y obedece mi voz; escucha mis dulces palabras de sabiduría. Si tú pones atención y obedeces, ésto resulta en la unión con Dios. Él se une a nuestra naturaleza purificada. Debemos llegar a ser como Él para unirnos a Él. Si todavía estás pecando, tú perteneces al pecado y no a mí". Todo hombre es juzgado por sus palabras y sus obras, incluyendo aquellos que dicen ser cristianos; Dios no le muestra parcialidad a ningún hombre. A menos que sea limpiado y purificado por el Espíritu del Señor que destruye el pecado dentro del hombre, el corazón de todo hombre comienza lleno de maldad, lleno de pecado, contaminado, y descalificado para el cielo.] | Lucas 13:23-27 Mostrar el Capítulo y las notas   23 Entonces alguien le dijo: --Señor, ¿son pocos los que se salvan? Y él les dijo: 24 --Esforzaos a entrar por la puerta angosta, porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán.3 [¿Es orar la oración del pecador, ser sumergido en agua, comer pan/beber jugo de uva, el camino difícil y angosto que muchos tratarían de entrar y no podrían? No, porque la inmediata, presunta salvación de las sectas deficientes del cristianismo es falsa, fábulas, mentiras, engaños — es el camino ancho y amplio que lleva a la destrucción. Las sectas deficientes del cristianismo han perdido totalmente el camino angosto y verdadero que pocos encontrarán. De la palabra de Dios en el interior: "angosto, en verdad, es el camino. Esfuérzate para entrar por la puerta angosta. Pocos la encontrarán. Los hombres han dejado de intentar. Se han sumergido en la iniquidad".] 25 Después que el dueño de casa se levante y cierre la puerta, vosotros, afuera, comenzaréis a llamar a la puerta diciendo: "¡Señor, ábrenos!" Pero respondiendo él os dirá: "No os conozco de dónde sois." [De la Palabra del Señor en el interior: "Yo sólo conozco a aquellos que han sido crucificados". Él sabe todo, pero "conocerlo" a usted significa que él llega a ser uno con usted, lo cual ocurre después de que usted ha sido crucificado. Usted puede llamarlo Señor; usted puede llamarlo Maestro; pero lo mismo hizo Judas. Llamar a Jesús Señor no lo hace su Señor. Él es su Señor sólo si Él lo ha liberado de todo pecado, si ha destruido su mente carnal, si Él lo ha purificado, y si Él suple todas las palabras que usted habla, todos sus pensamientos, y todas las acciones que usted realiza; Jesús dijo: "Si ustedes todavía están pecando, son esclavos del pecado," Juan 8:34; y si ustedes todavía están pecando, Jesús no puede ser Señor de ustedes porque Él dijo: "no pueden servir a dos maestros," Mat 6:24. Por lo tanto, como dijo Jesús, "¿Por qué me llamáis: 'Señor, Señor', y no hacéis lo que digo?" Lucas 6:46. De la Palabra del Señor en el interior: "Si tú todavía estás pecando, le perteneces al pecado y no a mi. Todos los hombres están sin excusa; si yo estuviera en silencio, ellos tendrían una excusa. Todos los hombres han oído el llamado al arrepentimiento. La gente debe soportar el precio de su comportamiento descarado". Muchos versículos identifican a aquellos que pertenecen a Jesús; y en varios otros versículos, Jesús nos ha dicho que debemos arrepentirnos, y que ya no debemos pecar, de otra manera seremos expulsados del cielo.] 26 Entonces comenzaréis a decir: "Delante de ti hemos comido y bebido, y en nuestras plazas enseñaste." [Esto se aplica bien a aquellos que piensan que la comunión o la "eucaristía" es comer y beber en su presencia; y esto prueba que los rituales de la comunión o eucaristía no tienen valor. Jesús niega que alguna vez ellos comieron y bebieron en su presencia y niega que su origen es válido. Por supuesto, Él sabe todo, incluyendo el hecho que ellos continúan pecando hasta la muerte; su negación es una negación de conocerlos por medio de su comer y beber en su presencia, y él niega haber enseñado entre ellos; ellos pensaron que ambas cosas habían sucedido y que esto les daba el derecho de entrar en el cielo. Si usted muere mientras todavía está pecando, usted será expulsado del cielo. Él sólo lo conoce si usted ha sido completamente crucificado.] 27 Pero os hablará diciendo: "No os conozco ni dónde sois. ¡Apartaos de mí todos los que hacéis iniquidad [obradores de maldad, que todavía están pecando]!"4 [Todo hombre es juzgado por sus palabras y sus obras, incluyendo aquellos que dicen ser cristianos; Dios no le muestra parcialidad a ningún hombre. De la Palabra del Señor en el interior: "Recuerda, toda persona que peca lo niega como Señor y Maestro. Si tú estás pecando todavía, le perteneces al pecado y no a Mi. Véanme a mi — por lo tanto ningún pecado tiene lugar en mi. Todos están esperando que Jesús sea su excusa. Yo les he advertido y les he dado los requerimientos y predicado las exclusiones; ellos no deben esperar ninguna otra cosa ni una conclusión". Si usted no lo ha visto ni lo ha escuchado, entonces tampoco lo conoce. A menos que sea limpiado y purificado por el Espíritu del Señor que destruye el pecado dentro del hombre, el corazón de todo hombre comienza lleno de maldad, lleno de pecado, contaminado, y descalificado para el cielo. De la Palabra del Señor en el interior: "Yo sólo conozco a aquellos que han sido crucificados". Él sabe todo, pero "conocerlo" a usted significa que él llega a ser uno con usted, lo cual ocurre después de que usted ha sido crucificado.] | Juan 8:34 Mostrar el Capítulo y las notas   34 Jesús les respondió: --De cierto, de cierto os digo que todo aquel que practica el pecado es esclavo del pecado.5 [Si usted todavía está pecando, el pecado es su maestro, y el Señor no puede ser su Señor ni Maestro porque como dijo el Señor, no se puede servir a dos maestros. De la Palabra del Señor en el interior: "Si todavía estás pecando, tú perteneces al pecado y no a mí. Aquellos que son de Cristo han acabado con el pecado. Recuerda, cada persona que peca lo niega a Él como Señor y Maestro." Su desafío es ser liberado del pecado por Él, para así ser más bien esclavo de la justicia, sólo hablando las palabras que usted le oye a Él decirle a usted inmediatamente antes de hablar y sólo hacer lo que Él le ordena que usted haga. No se engañe a sí mismo pensando que no está pecando; porque hasta que usted sea guiado por la luz del Señor en cada palabra que debe hablar y cada acción que debe hacer, usted está caminando en los caminos del mundo, de acuerdo al príncipe de la potestad del aire, (Satanás), en los deseos de la carne, satisfaciendo los deseos de su carne y los pensamientos de su mente; y eso es caminar en oscuridad, lo cual es pecado. A menos que su imaginación y su mente carnal hayan sido destruidas por el Señor y reemplazadas con la mente de Cristo, usted todavía está pecando.] |